En el año 1992 convencí a mi madre para que me comprara un doble casete que había visto anunciar por la televisión. Se titulaba "Lo mejor del Soul" y venía repleto de estándares de esta música. Yo tenía entonces 13 años y me había llamado mucho la atención una canción que traía: el clásico Stand By Me.

Ese fue mi primer disco Soul. He escuchado tantas músicas diferentes desde entonces y explorado tantos sonidos que podríamos llenar otros 5 años de blog. Pero siempre me digo a mí mismo: la música debería ser bonita, agradable, emotiva y directa al corazón.

El legado de todos los artistas Soul es tan grande, tan inolvidable y tan imprescindible para comprenderse a uno mismo que cualquier amante de la música de verdad debería en algún momento sumergirse en todo esto. Es la máxima expresión del corazón puesta en la música, ignorarlo es un pecado casi capital.

Personalmente, en la música Soul siempre he encontrado todo aquello que no me atrevo a decirle a nadie. Son la voz de mis pensamientos y de mis sentimientos. Sin muchas canciones de las que os he hablado en esta web no habría superado los peores momentos de mi vida y los alegres no lo hubieran sido tanto.

En el fondo, creo que sigo siendo el mismo chico de 13 años: me derrito con todo lo romántico, me encanta el amor por encima de todo aunque nunca sepa muy bien cómo definirlo, sólo puedo llorar cuando nadie me ve, nunca aprenderé a conocer mis sentimientos por muy científicamente que me lo tome y siempre tomaré algunas decisiones que aunque creo han sido recapacitadas las he tomado con el corazón.

¿Sabéis?, después de tantos años en este sonido me doy cuenta que de alguna manera esta música me escogió a mí, soy el perfecto candidato para ella. Yo que pensaba que era libre de escucharla, pero realmente soy un esclavo, porque por mi manera de ser escuche lo que escuche siempre acabo volviendo a sus brazos.

Sí, puedo decir que la música Soul me escogió a mí. Y vosotros, tened cuidado que no os pase lo mismo porque acabaréis adorando una música que probablemente toda la gente que conocéis nunca comprenderá ni se esforzará en comprender.